Los materiales educativos son herramientas de gran valor para propiciar aprendizajes en la escuela, aunque muchos de ellos, quedan circunscritos al aula virtual o presencial o sólo a una institución educativa. De esta manera se limitan sus potenciales usos y los aportes que podrían realizar a las prácticas docentes.
Pensemos, simplemente, en las acciones de nuestros alumnos: ellos se encuentran en Internet para darse apoyo, estudiar juntos, resolver alguna tarea, comparten los registros de una clase, ejercicios resueltos, las producciones de otros compañeros, las guías , los resúmenes, como una manera de ayudarse y acompañarse para resolver problemas que una propuesta curricular pueda plantearles. (Maggio, 2012)